Ayudo a las personas a descubrir su “por qué”, su trabajo basado en su propósito. Ese que está lleno de sentido, que las hace levantarse felices cada mañana con una sonrisa en la cara.
Algunas de esas personas vienen a verme con ideas claras. Pero otras, confundidas por los mandatos sociales y una carrera de toda la vida llena de logros, sienten que perdieron el rumbo y necesitan reorientar sus brújulas internas.
Para esto, aplico el marco de trabajo del Ikigai. Y para hacerlo aún más poderoso y revelador, uso la metodología LEGO® SERIOUS PLAY®.
Así lo hago.
Ikigai es un concepto japonés que significa “razón de ser”.
La palabra se refiere a tener una dirección o un propósito en la vida, eso que hace que la vida valga la ...
Tuviste una idea genial. Creés que puede funcionar muy bien y te entusiasma hacerla realidad.
Lo conversás con un par de amigos, con tu pareja, con gente de confianza, y todos validan que es algo interesante.
Sin embargo, mirando los datos de la realidad, los resultados no son alentadores: la mayoría de los negocios fracasa, y fracasa por la mentalidad del emprendedor. No por el contexto económico. No porque el producto falla. Porque todo eso se podría ajustar si quien lleva el negocio adelante da los pasos correctos en el orden preciso.
El problema es que -casi- siempre, empezamos sólo con la idea que nos encanta.
Sin organizarnos, sin validar muchas cosas esenciales que necesitamos tener claras antes de comenzar, sin analizar los números y sin un plan.
Aquí te cuento cuáles son los pasos que tenés ...
En este artículo te cuento:
La semana pasada decidí pasar todos mis programas al formato virtual. Lo concreté en un par de horas.
Tengo la ventaja de ser experta en el mundo online y en sistemas de aprendizaje a distancia. Y la desventaja de ser asmática, así que estoy dentro de los grupos de riesgo del COVID-19.
Teniendo en cuenta este combo, y que próximamente es muy probable que nos recomien...
Vivimos escuchando que para ser felices tenemos que seguir nuestra pasión. Que si queremos tener un negocio que nos llene al alma, precisamos enfocarnos en nuestro propósito. Que sin pasión, no vamos a poder sostener nada en el tiempo. Y por otro lado, nos dicen que sin propósito, no tenemos una misión duradera.
Parecería que pasión y propósito son parecidos cuando hablamos de negocios, pero... ¿son lo mismo?
Si tu duda es qué rumbo tenés que seguir, si el que te marca tu pasión o el que te señala tu propósito, este video te va a allanar el camino.
Además, te aclarará qué no puede faltar, como primer paso, para que tu negocio tenga éxito.
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Vayamos al final del 2016. Si mi vida fuera una película, me verías frustrada, preguntándome qué me estaba pasando. Las cosas me estaban yendo bien, pero me sentía vacía.
Mi profesión me gustaba, trabajaba con una socia de quien aprendía mucho y nos llevábamos muy bien, teníamos buenos clientes, tenía buena salud, estaba rodeada de amigos, viajaba… y sin embargo no era feliz. Algo me faltaba.
Esa sensación no era nueva. Me había acompañado toda la vida. Y a pesar de haber tratado de hacer las cosas bien siempre -buena en el colegio, buena carrera profesional, buenos trabajos-, algo faltaba. No me sentía plena. Y no sabía por qué.
Me había resignado a pensar que mi vida sería siempre así. Una eterna búsqueda de algo que tuviera sentido, que me diera más significado.
Juliana me había escrito muy preocupada. Se estaba divorciando, sus hijos estaban a punto de irse de la casa familiar para estudiar en otra ciudad, y como si todo eso fuera poco, había empezado a preguntarse si el trabajo que tenía -una posición en una multinacional donde había estado más de 10 años- era lo que realmente quería hacer.
Su foco había estado puesto muchos años en su familia. Pero ahora que su familia se desarmaba, su estructura completa tambaleaba, y había empezado a cuestionarse varios aspectos de su vida.
Se sentía rara. Se sentía como un volcán a punto de hacer erupción. Como una olla a presión a punto de estallar.
Su mayor miedo era qué iba a pasar cuando eso sucediera.
Sabía que ne...
Siempre recuerdo a la Señorita Roxana, mi maestra de 3er grado. Yo iba a una escuela de doble escolaridad, de esas que son mañana y tarde.
En el regreso al aula después del recreo largo, que era el que seguía a la hora del almuerzo, la seño nos leía un cuento. Todos los días un capítulo cortito, contado con distintas voces según cada personaje. Todos los días una aventura diferente, que nos dejaba con ganas de más.
Aquel cuento era Dailan Kifki, de María Elena Walsh. Y lo recuerdo como un despertar al mundo fascinante de las historias que me podían contar los libros.
Muchos años más tarde, sigo siendo una ávida lectora, aunque ahora mezclo muchos géneros distintos. Y debo confesar que las series y los videos en YouTube le roban un espacio importante al tiempo de lectura.
Pero aún así, conservo ese amor por los libros y las historias que abren la cabeza y la ima...
Aún recuerdo cuando hace muchos años alguien me invitó al predio La Rural, en la ciudad de Buenos Aires, a "un evento gratuito donde muchas personas dan charlas y comparten temas interesantes".
En aquel momento trabajaba en una multinacional, entraba a las 9 de la mañana y no sabía a qué hora salía, y mi tiempo no era mío. Así que pensar en "gastar" una tarde entera para escuchar historias sobre temas supuestamente inspiradores, me parecía algo sin sentido.
Y no fui.
Haciendo un fast forward a mi mirada de hoy, todavía lamento haber perdido la oportunidad de haber estado en la primera edición de las Charlas TED en la Argentina.
TED es una ONG que se dedica a difundir ideas que vale la pena compartir. Comenzó en 1984 y hoy en día acumula miles charlas y cientos de miles de visualizaciones de sus ...
Hoy caminaba por la calle y me encontré con una situación que me hizo reflexionar e inspiró esto que te cuento hoy.
“No tengas miedo” le decía una mamá a su hijo, que se escondía detrás de ella, aterrado por la presencia de un perro bastante grande. Aclaremos que el perro era un gran danés y que el chico tendría dos años, máximo. “Es cachorro. No tengas miedo”, decía su dueña. "Acaricialo, no te va a hacer nada", insistía la mamá.
“Bueno”, pensé. “Si yo tuviera enfrente un perro con la misma altura que yo, cara a cara, seguramente también me escondería detrás de mamá.”
Y después me quedé pensando. Porque acá hay varios puntos interesantes.
También como humanos nos pasa que hay personas que lo descubren rápido, mientras que otras se pasan la vida cuestionándose cuál será, aún teniéndolo delante de la nariz. Algunos lo viven a pleno, y hay otros que, aún viéndolo clarísimo, se desenfocan y se desvían de él.
Cuando tenés un propósito claro vivís una vida con más significado. Te levantás feliz cada mañana y vivís cada día a pleno, porque sabés quién sos, a qué viniste y cuál es tu Norte, para dónde vas.
Acá te cuento en detalle cuáles son las 10 ventajas de saber cuál es tu propósito en la vida y para qué te sirve en cada caso.
Si no sabés cuál es tu propósito no tenés claro qué querés. Y cuando pasa eso, solés gastar tiempo en cosas que no son tan importantes para vos. A veces, incluso, sin darte cuenta. Estás más enfocad...